La sensación de ser observado es frecuente en la vida cotidiana. Las investigaciones realizadas en Europa y EEUU muestran que más de un 90% de los encuestados afirma haber sentido que alguien los miraba a sus espaldas. Además, la mayoría ha experimentado a veces que, cuando miraba a alguien por detrás, la persona se volvía.
Los animales también parecen notar que son observados. Algunas personas afirman poder despertar a sus perros o gatos dormidos con sólo mirarlos. Quizá el origen de esta capacidad se encuentre en nuestro pasado evolutivo. Si un animal podía percibir que era observado por un depredador oculto, tenía más posibilidades de escapar.
Insinúo que el proceso de la visión es un proceso bidireccional, con un movimiento interior de la luz y una proyección exterior de las imágenes. Las imágenes son proyectadas en lo que llamo un 'campo mental'. Nuestra mente llega a tocar lo que contempla.
La idea de que los campos son más amplios que los cuerpos materiales nos resulta familiar. Por ejemplo, el campo de influencia de un imán se extiende mucho más allá de los límites del propio imán. Lo mismo ocurre con el campo del teléfono móvil. De modo similar, el campo mental se origina en nuestro cerebro pero se extiende por el mundo que nos rodea de acuerdo con nuestra atención e intención.
Rupert Sheldrake (biólogo), La sensación de ser observado, La Vanguardia, 29/VIII/2004
¡¡Biólogo!! No sanador, no monje eremita. BIÓLOGO. Empiristas, etcétera. Uf, uf! Cal reprendre Barbotin però ja. ¿¿¿Por qué me emociona tanto esto???
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